lunes, 26 de abril de 2010

Ojala que llueva polenta!



Después del susto con la cebolla asesina, vamos con una receta más calmadita, sin sobresaltos, masticando bien, y muchas muchas veces…



Sigo con las naranjas sanguinas. Hay que aprovechar mientras esta en los mercados. Esta es una de esas recetas que usan la polenta para un plato dulce. La polenta es un ingrediente básico en la gastronomía italiana, su consumo no solo se reduce a su función como  acompañamiento, sino que se ha convertido también  en la protagonista del plato, ya sea como base crujiente o como el toque indispensable en una tarta como en este caso. Es básicamente, maíz molido, y en el norte de Italia, la polenta es tan popular que su consumo sobrepasa al de la pasta.  Su versatilidad es tan grande que se puede transformar un plato con solo incluirla en la receta. Desde gnocchi de polenta, polenta frita, polenta con queso fundido, en estofados, como relleno de verduras, etc. Existen dos tipos de polenta la que es finamente molida y la que esta medianamente molida, aquí en Inglaterra se encuentra en todos los supermercados, en las dos versiones, además de la versión rápida y la normal. Es uno d esos ingredientes que o te encanta o lo odias, a mi me encanta…




Esta tarta es un bizcocho con pistachos, a la que después de haber sido horneada se baña con un sirope previamente cocinado de zumo de naranja sanguina, lo que le da un color muy atractivo y ese dulzor especial que tienen estas naranjas tan suculentas.  Si no encontráis polenta se puede perfectamente sustituir por almendra molida, pero la polenta le da al bizcocho una textura y sabor especiales.  La receta original también lleva “sour cream” que se puede traducir por crema acida. También esta se puede sustituir por “buttermilk” o yogur natural. La naranja sanguina no es tan fácil de encontrar así que si tenéis naranjas o mandarinas, el resultado es igualmente delicioso.

 
Ingredientes para la tarta

300g “sour cream” o “buttermilk” o yogur

125 mantequilla pomada

1 taza (220g) azúcar

2 tazas (300g) harina

½ cucharadita bicarbonato

1 cucharadita polvos de hornear

2/3 taza (110g) polenta molida fina

1 cucharada de ralladura de naranja sanguina

¾ taza (180ml) agua

2/3 taza (100g) pistachos tostados*

Para el jarabe de naranja

1 taza (250ml) zumo de naranja sanguina

1 taza (220g) azúcar

1 palo de canela en rama




Elaboración

Precalentar el horno a 150grados. Engrasar un molde redondo de 20cm.

Mezclar los ingredientes del jarabe en una cacerola pequeña. Llevar a ebullición removiendo al mismo tiempo. Reducir el fuego y cocinar 15 minutos o hasta que el jarabe espese. Colar y enfriar a temperatura ambiente.

Para la tarta, mezclar la “sour cream”, mantequilla, azúcar, la harina pasada por un colador, el bicarbonato, los polvos de hornear, la polenta, la ralladura y el agua en un bol grande. Con la batidora eléctrica, mezclar a velocidad media, o hasta que adquiera un color mas pálido. Anadir los pistachos.

*para tostar los pistachos, extenderlos en una sartén sin aceita y asar a fuego muy lento agitándolos para que no se quemen, o dorarlos en una bandeja al horno unos cinco minutos.

Extender la mezcla en el molde y hornear sobre una hora. Pasado este tiempo, dejar la tarta en el molde por diez minutos. Desmoldar y enfriar en rejilla. Decorar con rodajas finas de mandarina y servir la tarta caliente o fría y acompañada del jarabe.





domingo, 18 de abril de 2010

Mi entrada póstuma...o casi.


Los franceses tienen un “je ne sais quoi” a la hora de cocinar, lo llevan en la sangre…Cocinar y comer, es para ellos,  una experiencia cotidiana pero a la vez, algo místico, se reúnen alrededor de la mesa a compartir vivencias y buena comida, en muchos aspectos se parecen en eso al resto  de los latinos, celebración alrededor de una mesa repleta de comida, la familia y los amigos, para que pedir mas? Puede que la “French Cuisine” se diferencie de la española, por ejemplo, por el uso de diferentes ingredientes, y de la forma de cocinarlos, pero no hay duda de que los franceses son maestros en el arte de la cocina, y por eso, son conocidos internacionalmente. Escoffier estaría orgulloso…


La ternera Bourguignon, originariamente elaborada por los campesinos, se ha hecho un hueco en la alta cocina, tuvo su auge en los sesenta y ahora parece que regresa con fuerza en un merecidísimo revival culinario. Me alegro por ello, pues es un plato que si bien, su preparación es algo laborioso, su sabor y su elegancia lo convierten en  un imprescindible en una mesa acogedora y rodeada de gente que aprecia la buena cocina. Es algo elaborado, pues se empieza la noche anterior con una marinada, lo que le da a la carne un sabor extraordinario.

Tengo que decir que esta ha podido ser mi última entrada en el blog , y no porque el blog este en peligro, no, sino porque después de preparar, marinar, cocinar y brasear los ingredientes, después de colocar el material para la sesión fotográfica, después de emplatar y hacer todas las fotos, pues una no es de piedra, y el guiso tenía muy buena pinta, por lo tanto una se sienta a la mesa, exhausta y con hambre, y en medio de la comida, que una estaba disfrutando muchísimo, una incordiante cebollita, se me atraviesa en la garganta y ahí note, sentí, presentí…que había llegado mi hora.  No podía respirar y mi corazón galopaba del susto, de repente me preparé para ver mi vida en escenas a cámara rápida, como dicen que se ve cuando una está a punto de morir. Pero no, en vez de eso, me rebelé, no podía ser que hubiera llegado mi hora, ¿tan pronto? Así que, a falta de algún samaritano dispuesto a hacerme la maniobra de Heimlich y ante la imposibilidad de que el gato reaccionara, opté por pegar un salto, con toda la fuerza o la poca fuerza que tenia, y resultó…el gato salió corriendo por un lado y la cebollita asesina por el otro…y yo, seguí comiendo…

Por lo visto, aun no me ha llegado la hora…




Ingredientes:

Para la marinada

Una zanahoria grande en rodajas grandes

Una cebolla cortada en rodajas grandes

1 bouquet garni(hacer un ramillete con la parte verde de un puerro, envolviendo tomillo, hojas de apio, y unas hojas de perejil)

Un talo de apio cortado

2 dientes de ajo

3 cucharadas de brandy

10 granos de pimienta negra

1litro y medio de vino tinto (del bueno)

2 cucharadas de aceite

1 kilo de ternera cortada en dados

Elaboración de la marinada:

Poner todos los ingredientes en un cuenco junto con los dados de carne. Llevar a la nevera y refrigerar toda la noche.




Ingredientes para el estofado:

200g de bacon cortado en daditos

150g de champiñones cortados a cuartos

1 cucharada de mantequilla

400ml caldo de carne o agua

150g cebollitas mini o francesas

1 cucharada de concentrado de tomate

½ cucharada de azúcar

2 cucharadas de ajo picado

2 cucharadas de harina

 

2 rebanadas de pan blanco sin la corteza y cortados en triángulos

2 cucharadas de perejil picado


Elaboración

Colar la marinada sobre un cazo y llevar a ebullición, reservar las verduras y el bouquet garni. Retirar la carne. Cando el líquido hierba, espumar, cocinar por cinco minutos y colar. En una cazuela con fondo grueso, calentar un poco de aceite y mantequilla, y dorar la carne en tandas. Retirar y reservar. Anadir las verduras de la marinada, y dorar. Volver a poner la carne, y añadir el concentrado de tomate, espolvorear la harina y añadir e liquido de la marinada y llevar a ebullición sin dejar de remover, agregar el caldo y el bouquet garni, llevar de nuevo a ebullición, tapar y llevar al horno por una hora y media, o hasta que la carne este tierna.




Mientras la carne se cocina en el horno, poner en un cazo las cebollitas, la mantequilla el azúcar y u poco de sal, y cubrir con agua. Cocer a fuego medio hasta que se evapore el agua, y agitar hasta que se doren las cebollitas. En una sartén freír los champiñones en mantequilla y añadir a las cebollitas. Freír el ajo con el bacón en un poco de aceite escurrir y añadir a las cebollitas y champiñones. 

Cuando la carne este tierna, colar la salsa, y devolver al fuego. Cocinar a fuego lento durante quince minutos, añadir los champiñones y el bacón,  y apagar el fuego.

Para el pan, untar con mantequilla los triángulos y hornear hasta que estén tostados, mojar una punta en la salsa, y espolvorear con el perejil picado. 

En el momento de servir, espolvorear el estofado, con perejil picado. Y cuidado con las cebollas asesinas!





domingo, 4 de abril de 2010

Un trio muy bien avenido


Supongo que a estas alturas todo aquel que visita este blog, ya habrá notado que me encanta cocinar con frutas...y no se equivoca. Me gusta por la versatilidad que le da a los platos, a los dulces, a los bizcochos, me gusta porque el dulzor que aporta es más sutil que cuando se usa solo azúcar, y me gusta porque es más sano también. Parece que al elaborar un postre con frutas estas portándote “menos mal” y se admite la licencia de un dulce, si lleva fruta….La receta original de estos pancakes lleva solo fresas, pero como en todo, se puede variar la cosa y a esta le puse cerezas, kumquats (esas naranjitas en miniatura, que se comen con piel a las que soy adicta) y arándanos, pero también quedan muy bien con naranjas, moras, o grosellas. Los pancakes parece ser que gustan a todo el mundo, especialmente a los niños, así que ahí van:

Ingredientes para los pancakes

4 huevos

2 cucharadas de azúcar

1 ½ tz buttermilk (si no tenéis, se puede hacer buttermilk en un momento, para ello, añadir una cucharada y media de zumo de limón a 1 taza y media de leche, dejar reposar quince minutos y listo)

100g mantequilla derretida

1 ½ harina

½ cucharadita polvo de hornear


Preparación

Batir los huevos y el azúcar en un bol, con batidora eléctrica, añadir el buttermilk y la mitad de la mantequilla. Pasar la harina y el polvo de hornear por un colador, y añadir la mezcla de los huevos con la harina, hasta que tengamos una masa homogénea .

Calentar una sartén antiadherente, pincelar con un poco del resto de la mantequilla, añadir ¼ taza de la mezcla y cocinar hasta que aparezcan burbujas en la superficie del pancake, darle la vuelta y cocinar hasta que se dore. Reservar y mantener cubierto para que no se enfríen mientras se cocina el reto de los pancakes.


Para la fruta glaseada

250g cerezas deshuesadas

250g kumquats o naranjas

250g arándanos

1/3 tz agua

½ tz mermelada (de naranja para los kumquats, de ciruela para las cerezas y de arándanos o moras para los arándanos)

1 cucharada de azúcar

2 cucharadas de zumo de limón


Preparación

Cocinar por separado de la siguiente manera:

Poner la mermelada, el agua, el zumo de limón y el azúcar en un cazo, y llevar a ebullición, añadir la fruta y reducir el fuego, cocinar dos minutos, hacer este procedimiento con cada fruta, por separado.

Para servir, apilar los pancakes, rociar con la fruta y decorar con nata montada y menta fresca.